Parte I
En enero del 2017, en un día laboral cualquiera mientras imprimía unos planos me dió un fuerte e incómodo dolor en el lado derecho del pecho.
En el momento pensé que se debía a un mal giro o un esfuerzo; pero, según como fue pasando el día, el dolor fue aumentando a tal punto que hasta se me dificultaba un poco respirar.
Como consecuencia, tuve que ir al médico al otro día temprano.
Me levanto temprano para poder coger el primer turno donde el doctor y así no perder tiempo y poder ir luego a mi trabajo.
Ya dentro del consultorio, el doctor me pregunta que a qué se debe mi visita y pues le explico.
A primera vista el me dice que es una neuritis (inflamación de un nervio) y que al estar próximo al pulmón eso me generaba dolor y, por consiguiente dificultad para respirar.
El doctor me indica unas pastillas anti inflamatorias y una radiografía de tórax…
Sólo para asegurarnos de que NO hay nada más.
Perfecto!
Salgo de allí me hago la radiografía (la cual al ser inicio de fin de semana, me entregan los resultados el lunes).
Me compro mis pastillas, con las cuales empecé a sentir mejoría al instante.
Pues nada, paso mi fin de semana normal.
El dolor se redujo y a espera del lunes para buscar los resultados.
Llega el lunes…
Luego de salir de mi trabajo me dirijo al centro médico a buscar los resultados de mi radiografía.
Cabe resaltar que tenía pensado solo buscar y llevarme los resultados a casa, porque como «TODO ESTABA BIEN» no iba a perder tiempo con el doctor para que me dijera:
«Ah! Todo esta bien!«
Recojo mi resultado y CURIOSA al fin decido abrirlo…
Oh sorpresa!
En la imagen se veía una masa ovalada en la parte superior de mi pulmón derecho (ya empiezo a asustarme y a ponerme nerviosa)…
Paso a leer la descripción…
Y ahí lo confirman: un nódulo en mi pulmón derecho de 3.5cm de origen indefinido (en ese momento lo único que pensé fue: Tengo que ver al doctor, Ya!).
En seguida fui y me senté a hacer turno para ver a mi doctor.
Un diagnóstico estaba cambiando mis planes…
Llega mi turno, entro y le entrego los resultados (de lo más normal, como que yo no he visto nada)
El los revisa e inmediatamente me confirma lo mismo que había leído y empieza a hacerme un cuestionario donde la primera pregunta es: Usted fuma?….
Qué carajo! Nunca en mi vida he fumado!!!!!!!
En fin el prosigue con el cuestionario y yo lo interrumpo para preguntarle: Qué significa ese nódulo? Es bueno o es malo?…
La respuesta…
A esto el me respondió lo siguiente: La naturaleza del nódulo la determinaremos con otro estudio que le indicaré… pero, de antemano le digo que, nada que esté en los pulmones es bueno.
Yo: Ooookkkkk!!!
Puedes continuar leyendo esta historia en los siguientes enlaces:
- Un diagnóstico cambia todos tus planes parte 2
- Un diagnóstico cambia todos tus planes parte 3
- La misericordia de Dios: volví a nacer
Continúa…
Por favor sea reflexivo en sus comentarios y sepa que si he decido compartir mi vivencia por esta vía, es porque sé que del otro lado del monitor hay personas que pueden estar pasando por la misma situación.
Y es una manera de motivarlos a seguir, que no se rindan. Que pongan todo en manos de Dios Todopoderoso, que es rico en Misericordia y Sanador por excelencia.
Sé que algunas personas dirán, que lo que me sucedió no fue tan grande, que existen cosas peores.
Bueno. ¡Tal vez! Pero yo no comparto esto como una manera de que me tengan pena. ¡Para nada!
Sino como una manera de que si tú que me lees pasaste o estás pasando por una situación similar, no te derrumbes, déjalo todo a Dios.
Podemos hablar, compartir e intercambiar vivencias.
Gracias.
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